Hueste
Durante la Edad Media, una hueste era un tecnicismo militar medieval que designaba a la reunión transitoria de mesnadas y gente de guerra (más caballeros o guerreros que soldados, pues estos últimos eran con frecuencia mercenarios), compuesta de cuerpos de infantería, arqueros y caballería pesada o ligera. Las tropas podían ser convocadas por reyes o señores feudales.
- Las mesnadas, se componían de vasallos, pudiendo ser caballeros, órdenes militares, e incluso confederaciones con extranjeros.
- De las huestes salían grupos o partidas para hacer algaras y cabalgadas, y a veces incluso pequeños cuerpos destacados (destacamentos) para correrías o incursiones rápidas en territorio enemigo (correduras o razzias) al abrigo de la sorpresa, regresando a esta formación principal después de haber quemado cosechas, talado viñas y saqueado granjas o poblaciones, con el correspondiente botín. Con las huestes también se solían sitiar y expugnar con ingeniería de guerra (por lo general, con arietes, torres y minas, o catapultas si había foso) las fortalezas, baluartes y asentamientos del enemigo o pelear en escaramuzas, batallas y guerras.
Creación del término
Hueste cayó en desuso en el siglo XVII, usándose en el XVI «Campo» y «Exército». Al comienzo de la Edad Media, no existía una palabra concreta para denominar a estos grupos de personas con objetivos militares salvo el fonsado. La palabra hueste aparecía en las Siete Partidas del siglo XIII, con una connotación que podría considerarse sinónima de la palabra tropas usada en el castellano moderno.