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Usuario:Bleff/TallerExpedito

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San Expedito

San Expedito en una pintura al óleo del siglo XIX en Palermo, Italia, con sus rasgos iconográficos típicos.
Información religiosa
Festividad 19 de abril
Atributos Soldado romano con una cruz que dice «hodie» (hoy), un cuervo bajo sus pies que dice «cras» (mañana) y una palma del martirio
Venerado en Catolicismo popular, vudú de Luisiana, hoodoo, vudú haitiano, candomblé, santería, espiritismo
Patronazgo Causas urgentes, procrastinación, abogados, comerciantes, viajeros

Según la devoción popular, Expedito (en latín: Expeditus) fue un soldado romano que fue martirizado en Melitene, en la Armenia antigua (actualmente Anatolia Oriental, Turquía), durante la persecución de Diocleciano en el año 303.

Su culto aparece por primera vez en el siglo XVIII.[1]

Aunque la Iglesia Católica no lo reconoce oficialmente como santo, es venerado como tal por los católicos de varios países, sobre todo en Argentina y Brasil.[2]

Debido a la falta de pruebas históricas de su existencia, el Papa Pío X decidió prohibir su culto y retirar su nombre del calendario litúrgico en 1905.[3]

San Expedito también tiene muchos seguidores en la isla francesa de Reunión, en el Océano Índico, donde se le relaciona con varios dioses hindúes, y ha sido incorporado como loa (espíritu) al vudú haitiano y al vudú de Luisiana.[2]

http://amis.univ-reunion.fr/Conference/presentation/141/

Historia

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La evidencia más antigua del culto a San Expedito incluye a un puñado de imágenes creadas en las tierras de los Hasburgo en la segunda mitad del siglo XVIII, entre ellas estos grabados de Franz Xaver Jungwierth (izquierda) y Jan Quirin Jahn (derecha).

La primera mención histórica de Expedito (en latín: Expeditus) es en el Martirologio Jeronimiano, un martirologio tradicionalmente atribuido a Jerónimo y probablemente compilado en la Galia del siglo VI.[2]​ Allí se lo identifica entre un grupo de seis soldados romanos que fueron ejecutados bajo el emperador Diocleciano en Melitene, en la Armenia antigua (actualmente Malatya, Anatolia Oriental, Turquía).[2]​ El texto únicamente proporciona los nombres de estos soldados y la fecha de su martirio, el 19 de abril.[2]​ De acuerdo a la tradición, su fecha de muerte es el año 303, probablemente porque fue un año de intensa persecución de los cristianos.[2]​ Si era un soldado romano en Melitene a finales del siglo IV, probablemente pertenecía a la Legio XII Fulminata que allí se encontraba, y fuentes devocionales del siglo XX lo describen incluso como comandante de esta unidad, lo que situaría su muerte en el siglo II y no en el IV.[2]​ Como mártir, Expedito pertenecería a la categoría más antigua de santos cristianos, ubicándose entre los muchos soldados romanos que fueron ejecutados entre los siglos III y IV y cuyos cultos se extendieron desde finales del Imperio Romano y continuaron con firmeza durante la Edad Media y en adelante.[2]​ Sin embargo, no existe evidencia de devoción a Expedito en la Edad Media, a pesar de lo que se afirma en la mayoría de las publicaciones devocionales.[2]​ En un intento de legitimar el culto al santo, estos textos sostienen que el santo ha sido venerado desde tiempos inmemoriales, con afirmaciones erróneas que se han repetido de una publicación a otra, como que un pueblo de la región francesa de Périgord llevaba su nombre ya en el siglo XVI.[2]​ Algunas fuentes afirman que Expedito fue beatificado en 1629 por Urbano VIII y canonizado en 1671 por Clemente X, aunque esta canonización nunca fue revisada y confirmada por la Iglesia Católica.[4]​ En 1675, cuando los bolandistas —eruditos encargados de recopilar todos los escritos sobre todos los santos católicos— publicaron los volúmenes de abril de su Acta Sanctorum, mencionaron brevemente a Expedito entre los demás mártires de Melitene, pero no lo describieron de otro modo, lo que sugiere que no conocían ninguna leyenda atribuida a él en esa fecha.[2]

Pintura de San Expedito realizada por un artista anónimo hacia 1781 y ubicada en Acireale, Sicilia.

A pesar de lo que afirman los textos devocionales, las primeras evidencias del culto a San Expedito no aparecen hasta la segunda mitad del siglo XVIII.[1][2][5]​ Se trata de unas pocas imágenes creadas en las tierras de los Hasburgo del Sacro Imperio Romano Germánico, incluyendo un dibujo de Franz Xaver Jungwierth (sin fechar, pero realizado antes de su muerte en 1790), que supuestamente se basó en una obra anterior de Franz Xaver Palko (fallecido en 1767); un grabado de Jan Quirin Jahn, supuestamente realizado después de 1766; y, por último, una pintura para la iglesia austriaca de Bruck an der Mur, de aproximadamente la misma época y firmada por Johann Ferstler.[2]​ Según el historiador Mathew Kuefler, el hecho de que todas ellas fueran creadas por artistas identificados—dos checos, un bávaro y un austriaco—señala que el culto a San Expedito se originó entre las clases altas, posiblemente a través de la emperatriz María Teresa (que gobernó entre 1740 y 1780), conocida por su devoción católica y sus intentos de inculcar formas novedosas de la misma entre sus súbditos.[2]​ La única otra imagen conocida de San Expedito proveniente del siglo XVIII es una pintura ubicada en una iglesia menor de Acireale, en la costa oriental de Sicilia, realizada por un artista anónimo hacia 1781,[2]​ año en que fue elegido patrono de dicha ciudad.[1][5]​ No está claro por qué estas primeras demostraciones de devoción aparecen en lugares tan distantes, aunque una posible explicación es el hecho de que María Carolina de Austria, hija de María Teresa, fue reina de las Dos Sicilias desde 1768 hasta su muerte en 1814.[2]

Todas estas representaciones del siglo XVIII comparten características que demuestran que los principales rasgos iconográficos de San Expedito ya se encontraban establecidos, lo que sugiere una vez más que su devoción fue una creación intencionada.[2]​ En todas ellas aparece con el traje típico de legionario romano, vinculándolo a la antigua metáfora del "soldado cristiano".[2]

San Expedito en una litografía del siglo XIX, representado junto a un reloj.

https://thecatholicnewsarchive.org/?a=d&d=TCT19051109-01.2.15&e=-------en-20--1--txt-txIN--------

https://archive.org/details/saintswhoneverwe0000shep/mode/2up?q=expeditus

Iconografía

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San Expedito en una pintura anónima de finales del siglo XVIII, actualmente alojada en el museo de la diócesis de Graz-Seckau, Austria.
En la versión de la estampita que ha llegado hasta nosotros, San Expedito es representado como un soldado joven e imberbe; su cuerpo es presentado en una posición frontal, aunque su mirada está puesta en contacto directo con la cruz; viste túnica blanca, armadura, manto rojo y botas cerradas, el traje típico de un legionario romano de los siglos III y IV d. C. Ha dejado a un lado el casco, que es reemplazado por el halo o nimbo que lo identifica como santo; con su pie derecho pisa el cuervo que lleva en su pico un título que dice "cras" (mañana). En su mano izquierda sostiene la palma del martirio pero no señala ya un reloj y, a diferencia de San Jorge, no lleva en su mano derecha su espada de soldado; en su lugar, muestra una cruz, en la que se lee la palabra latina Hodie (hoy), como prueba de su conversión a la fe cristiana. El santo está ubicado sobre un fondo neutro o en un paisaje ideal, aunque existen variantes en las que se incluyen imágenes de los distintos santuarios en los que se venera. (...) A pesar del dramatismo del momento representado, debido a la acción llevada a cabo por el santo (y su destino de martirio), su actitud es digna y serena, el rostro y la mirada calmos, no gesticula ni muestra emoción alguna.[4]


La imagen de San Expedito pisando un cuervo ya aparece en algunas de sus representaciones más antiguas, realizadas en el siglo XVIII.[2]​ Esta particular acción remite a la única leyenda asociada al santo, la cual cuenta que el Diablo se le apareció en forma de cuervo e intentó disuadirlo de convertirse al cristianismo.[2]

Yo sé, y conmigo lo sabe toda persona que lo haya reflexionado con un poco más de atención, que, puesto ante sus palabras, nadie que tema a Dios dejará de corregirse, a no ser alguien que piense que aún ha de vivir más. Eso es lo que mata a muchos que dicen «Mañana, mañana», pero la puerta se les cierra repentinamente. Permaneció fuera con graznido de cuervo, porque careció del gemido de la paloma. «Cras, cras» (mañana, mañana), es el graznido del cuervo. Gime como una paloma y golpea tu pecho; pero, herido con esos golpes de pecho, corrígete para no dar la impresión de que no hieres tu conciencia, sino que con los puños apisonas tu mala conciencia haciéndola más dura, no más recta.[6]


Culto

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Uruguay.[7]

La oración a San Expedito difundida en Argentina dice:

Mi San Expedito de las causas justas y urgentes, intercede por mí junto a Nuestro Señor Jesucristo, para que venga en mi socorro en esta hora de aflicción y desesperanza.

Mi San Expedito tú que eres el Santo guerrero. Tú que eres el Santo de los afligidos. Tú que eres el Santo de los desesperados. Tú que eres el Santo de las causas urgentes, protégeme, ayúdame, otorgándome: fuerza, coraje y serenidad. ¡Atiende mi pedido! (En esta parte se debe realizar el pedido).
Mi San Expedito, ayúdame a superar estas horas difíciles, protégeme de todos los que puedan perjudicarme, protege a mi familia, atiende mi pedido con urgencia. Devuélveme la Paz y la tranquilidad.
¡Mi San Expedito! Estaré agradecido por el resto de mi vida y propagaré tu nombre a todos los que tienen Fe.

Muchas Gracias[8][9]

Afro brasil.[10]

https://www.imparcial.com.br/noticias/santo-expedito-respeitado-por-outras-religioes,51091

En la isla de Reunión

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https://www.cairn.info/revue-societes-2001-2-page-125.htm

https://www.scielo.org.mx/scielo.php?pid=S1870-00632016000300331&script=sci_arttext

Reunión https://archive.org/details/isbn_9788408164715/page/267/mode/1up?q=expedito

https://www.ultimahora.com/por-que-san-expedito-no-figura-como-santo-n1143723?_amp=true

Religiones de la diáspora africana

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Un altar vudú haitiano en un festival para los espíritus guedé en Boston, Estados Unidos, 2010.

La figura de Expedito ha sido incorporada a varias expresiones religiosas de la diáspora africana. En Nueva Orleans, al sur de Estados Unidos, es conocido como Expedite y venerado dentro del vudú local, el hoodoo y la santería.[11][12][13]​ En los años 1920, Zora Neale Hurston documentó el culto al santo en las prácticas hoodoo de la zona, siendo invocado para poner fin a conflictos domésticos, evitar el desalojo o para soluciones rápidas.[2]​ En los registros del etnólogo aficionado Harry Middleton Hyatt, que estudió las religiosidad popular de Nueva Orleans en la década de 1930, Expédite figura en un ritual diseñado para darle mala suerte a un enemigo, y en un hechizo de amor destinado a hacer que una mujer se enamore de un hombre.[2]​ El santo continúa siendo invocado por los practicantes modernos del vudú de Luisiana.[2]​ Una práctica común entre ellos consiste en visitar la tumba de Marie Laveau en el Cementerio de San Luis y luego acudir a una estatua de San Expedito ubicada en la cercana Iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe (Church of Our Lady of Guadalupe).[14]​ Los devotos del santo le ofrecen flores, ron y pound cake, aunque no tienen permitido dejar ofrendas dentro de la iglesia, por lo que generalmente se dejan en la tumba de Marie Laveau en su nombre.[14]

Expedito también ha sido asimilado al vudú haitiano, aunque de distinta manera. Según Alfred Métraux, que viajó a Haití en los años 1940, San Expedito era invocado en una maldición vudú que pretendía la muerte de alguien, llamada l'envoi mort o expédition, lo que llevó al antropólogo a suponer que la similitud entre el nombre de este ritual y el del santo era la razón de su conexión.[2]​ Estas oraciones vudú detalladas por Métraux dicen: «[Expedito], envía a todos mis enemigos visibles e invisibles tras de mí, haz que caigan sobre ellos rayos y tormentas».[3]​ El autor también documentó la incorporación de varios santos católicos como sustitutos de los loa (los espíritus vudú).[2]​ En el vudú haitiano, San Expedito fue incorporado como una representación de Guedé Nibo, uno de los tantos espíritus de la muerte conocidos como guedé.[2][15]

La asimilación de la figura de Expedito no se limitó al vudú, sino también a otras formas de religiones de la diáspora africana como el candomblé brasileño, donde sus imágenes son utilizadas para representar a un espíritu orixa llamado Longonedé, que es adorado como un proveedor de necesidades.[2]​ San Expedito también es invocado en ciertas formas de santería, como uno de los alter egos del orixa Elegguá.[16]

https://www.jstor.org/stable/25613043?read-now=1&seq=1#page_scan_tab_contents

Referencias

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  1. a b c H. T. (1906). «Saint "É Spedito."». The Month: A Catholic Magazine (en inglés) (Londres: Longmans, Green & Co.) (509): 544-546. Consultado el 29 de junio de 2024 – via Internet Archive. 
  2. a b c d e f g h i j k l m n ñ o p q r s t u v w x y z Kuefler, Mathew (2018). «The Convertible Saint: Expeditus through Time and Space». Journal of Religious History (en inglés) (John Wiley & Sons) 42 (1): 25-51. ISSN 0022-4227. Consultado el 18 de diciembre de 2022 – via Wikipedia Library. (requiere registro). 
  3. a b Gilbert, Colette; Gilbert, Philippe (2012). «Saint Expédit, ou le succès d'un saint ad hoc». Le Marcheton (en francés) (Vieillevigne: Association généalogique des marches vieillevignoises) (10): 38-44. Consultado el 23 de junio de 2024. 
  4. a b López Menéndez, Roberto Alfredo (2012). San Expedito, de la imagen al culto: la estampita y la reconstrucción del culto en el imaginario argentino del siglo XXI (Tesis de Maestría). Universidad Nacional de San Martín. Consultado el 30 de junio de 2024. 
  5. a b Butler, Alban (1956). Herbert Thurston, S. J.; Attwater, Donald, eds. Butler's Lives of the Saints (en inglés) II. Nueva York: P. J. Kennedy and Sons. p. 128. Consultado el 30 de junio de 2024 – via Internet Archive. 
  6. San Agustín. «Sermón 82». Traducido por Pío de Luis Vizcaíno. Roma: Nuova Biblioteca Agostiniana; Città Nuova. Consultado el 30 de junio de 2024. 
  7. Capurro, Eloísa (4 de junio de 2009). «Mi querido Santo». El País. Montevideo. Consultado el 30 de junio de 2024. 
  8. «San Expedito: quién fue y por qué cientos de fieles se acercan a la iglesia de Balvanera». Página/12. Buenos Aires. 19 de abril de 2022. Consultado el 22 de diciembre de 2022. 
  9. «San Expedito: ¿Quién fue y por qué se celebra su día el 19 de abril?». Clarín. Buenos Aires. 19 de abril de 2020. Consultado el 22 de diciembre de 2022. 
  10. Johnson, Paul Christopher (2018). «Modes and moods of “Slave Anastácia,” Afro-Brazilian saint». Journal de la Société des Américanistes 104 (1): 27-73. ISSN 1957-7842. Archivado desde el original el April 29, 2019. Consultado el December 22, 2022 – via OpenEdition. 
  11. Haskins, Jim (1990) [1978]. Voodoo & Hoodoo: Their Tradition and Craft as Revealed by Actual Practitioners (en inglés). Scarborough House. p. 61. ISBN 0-8128-6085-3. Consultado el 29 de junio de 2024 – via Internet Archive. 
  12. Baer, Hans A. (1984). The Black Spiritual Movement: A Religious Response to Racism (en inglés). Knoxville: University of Tennessee Press. p. 132. Consultado el 29 de junio de 2024 – via Internet Archive. 
  13. Dumars, Denise (2011). «The Strange Case of St. Expedite». Llewellyn's 2012 Magical Almanac: Practical Magic for Everyday Living (en inglés). Llewellyn Worldwide. pp. 60-67. ISBN 978-073-873-211-4. Consultado el 29 de junio de 2024 – via Google Books. 
  14. a b Stuart, Bonnye E. (2012). Louisiana Curiosities: Quirky Characters, Roadside Oddities & Other Offbeat Stuff (en inglés). Rowman & Littlefield. p. 237. ISBN 978-076-279-103-3. Consultado el 23 de junio de 2024 – via Google Books. 
  15. Martínez Montiel, Luz María (2005). El exilio de los dioses. Religiones afrohispanas (Recurso en línea). Madrid: Fundación Ignacio Larramendi. p. 196. Consultado el 30 de junio de 2024. 
  16. Fanthorpe, Lionel; Fanthorpe, Patricia (2008). Mysteries and Secrets of Voodoo, Santeria, and Obeah (en inglés). Dundurn Publishing. pp. 74-75. ISBN 978-155-002-784-6. Consultado el 24 de junio de 2024 – via Google Books. 

Enlaces externos

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